La batalla legal entre Apple y Samsung no parece tener fin. A todos los frentes abiertos entre las dos compañías por el mundo se suma ahora uno más: Samsung exige que Apple le muestre el código fuente del iPhone 4S, así como los acuerdos firmados por Apple en Australia. Su fin, conseguir prohibir la comercialización del iPhone en este país.
Según reclama Samsung ahora, el iPhone 4S está infringiendo tres patentes relacionadas con la comunicación inalámbrica 3G. Por esta razón, la compañía coreana ha solicitado ver el código fuente del iPhone 4S, así como los acuerdos firmados por Apple con las operadoras australianas Vodafone, Telstra y Optus, para poder evaluar las posibles infracciones de patentes. Al parecer, Samsung también está tratando de averiguar las subvenciones que las empresas de telecomunicaciones pagan a Apple por la venta de los iPhone asociados a tarifas y planes.
Estaba claro que, ante los continuos ataques de Apple, Samsung no se iba a quedar cruzada de brazos. Recordemos que la multinacional coreana se enfrenta a demandas por infracción de patentes en sus smartphones y tabletas de última generación e incluso, en Australia, Apple consiguió que la venta de la Galaxy Tab 10.1 se prohibiera temporalmente (medida cautelar), en espera de la decisión final de los tribunales de este país.
Una de las alegaciones de Apple, ante la supuesta infracción de patentes por parte de Samsung, decía que los productos coreanos estaban influyendo negativamente en su cuota de mercado. Los coreanos tienen claro que se va a demostrar que desde 2008, cuando entra el iPhone 3G en Australia, la cuota de mercado de Apple ha ido aumentando, y que si se dan subsidios para el iPhone también deberían darse para otros productos como los de Samsung.
Evidentemente, Apple no está dispuesta a compartir ninguno de los secretos relacionados con el iPhone 4S con nadie, si no es con una orden judicial. Así que Samsung tendrá que esperar a que la corte australiana se pronuncie para conocer los datos que solicita en relación al nuevo iPhone. Mientras tanto, el iPhone 4S ya se vende y Samsung está pendiente de la decisión judicial para comercializar sus equipos.
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